martes, 26 de febrero de 2013

desconcertada

escucho todas y
cada palabra impacta
en mi cerebro,
se clava/
repito la oración
y el camino,
entre una idea o una
respuesta queda
fijo en la esquina del
techo.

me quedé sin ideas,
se acabó mi poder creativo;
nada estimula
mis neuronas que perdieron
automatización

y recuerdo ese primer porro
que me estalló la paranoia
e hizo que pensará que
me había vuelto loca
y quedaría presa
para siempre en
una vida paralela.

ya está, se apago la luz o
peor, corrí las cortinas
y quedé ciega.

todavía no entiendo
y desespera